
Hoy, Jorge Luis Borges, hubiera cumplido 121 años. Queremos celebrar su onomástica trayendo a coalición otro cumpleaños, otro nacimiento, en este caso, a la literatura. Él mismo lo cuenta:
«Mi memoria me devuelve a una tarde de hace sesenta años, a la biblioteca de mi padre en Buenos Aires. Estoy viendo a mi padre; (…) Lo estoy viendo ahora mismo y oigo su voz, que pronuncia palabras que yo no entendía, pero que sentía. Esas palabras procedían de Keats, de su Oda a un ruiseñor. (…) Yo creía saberlo todo sobre las palabras, sobre el lenguaje (cuando uno es niño, tiene la sensación de que sabe muchas cosas), pero aquellas palabras fueron para mí una especie de revelación.»
Y también lo cuenta Claudia Capel, en su libro ‘Borges invisible’, del que hemos entresacado este extracto.